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Su piel ya no es la suya, brillante y llena de luz, sus ojos luminosos se han precipitado en unas cuencas profundas y oscuras, su cabello desapareció. Su cuerpo, ahora está reducido a un esqueleto de huesos diminutos y frágiles. La veo y no es ella. Aquella mujer vigorosa de hace año y medio que podía con todo, robusta, llena de salud, de fuerza. Llena de vida.
Duele tanto ver la degradación a la que somete esta enfermedad a los enfermos¡¡¡ La veo llena de tubos, de pinchazos, de sondas. La veo cansada y triste, llorando a ratos. Acordándose de mi padre, de nosotros y de sus nietos. Mi madre ya no es aquella que conocí, ahora es una mujer enferma en lo más duro de la enfermedad. La veo y recuerdo nuestras tardes de compras, nuestros paseos cuando mi hijo cuando era una bebe, su sonrisa, su voz alegre y cantarina.
Ahora mi madre yace en una cama postrada, yo paso la noche junto a ella y toco esa mano que me parece extraña. Pero no. Es ella. Acaricio su rostro y la beso. Y seguimos hablando en la oscuridad del hospital, con aquella complicidad que nunca desaparecerá entre nosotras. Tengo el corazón roto pero debo seguir adelante por ella y mi familia hasta el final.
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Carmen, ten mucho ánimo, consuelala, y piensa que la vida es así..tod@s estamos abocados a desaparecer..pero tienes razón en decir que ésta enfermedad es muy cruel..piensa que también es cruel quien muere en otras circunstancias, padres a los que no les da tiempo de despedirse de sus hijos , hijos que ven salir a sus padres jóvenes, coger el coche y desaparecer de sus vidad..todas las muertes son crueles........a nosotr@s nos ha tocado sufrir de ésta manera,
Cada tragedia es personal, e intransferible, quizás el universo nos prepare de ésta forma.
Un abrazo muy fuerte.
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Carmen, ¡cuánto dolor en tus palabras! ¡Cuánto dolor nos hace vivir esta enfermedad! Mucho ánimo. Un abrazo.
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Como te comprendo, soy nueva por aquí, pero tengo una situación parecida, sólo te puedo decir ánimo, y que lo siento, la vida no debería ser tan cruel
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Carmen ¡QUÉ GENEROSA ERES! entregándote en cuerpo y alma a tu madre. Solo alguien como tú, a pesar del infinito dolor y la tristeza de ver así a tu madre, es capaz de "tragarse" el dolor para dar paso a la MÁS TOTAL Y ABSOLUTA ENTREGA. ATESORA estos momentos de entrega, porque junto con el resto de vuestra vida,te van a dar después una tranquilidad de espíritu y una fuerza increible para seguir adelante cuando pienses en tu madre.
Un fuerte abrazo.
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guapa llorando estoy al leerte q maldita enfermedad.
un abrazo enormeeee , es desolador
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Carmen, me has hecho revivir cosas... tu tienes la suerte de poder estar junto a ella en estos momentos y las dos lo llevarán siempre en el corazón. Un abrazo y ánimo guapa
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Tu situación me recuerda la mía. Mi padre lleno de vitalidad de energía, ahora todo tranquilo pensativo y triste. Que suerte tienen cuando no tienen que vivir esta enfermedad... Un abrazo
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Mucho ánimo. No estás sola. Tu madre estará siempre contigo.
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Que bien has narrado lo que estas pasando, según lo leía estaba reviviendo los últimos momentos de mi madre... "las cuencas de los ojos, un cuerpo de huesos y piel"... Sigue agarrando esa mano pq es el mejor regalo para ella y te digo que siempre te acordarás de esos momentos agarradas... Mucho ánimo y fuerza.
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Hace 10 años