
Es el conjunto de acciones que se pueden realizar con el fin de disminuir la incidencia y/o mortalidad por cáncer.
Tiene los siguientes objetivos:
- Disminución de la incidencia: alrededor de un 50% de los cánceres se pueden evitar con hábitos de vida saludables.
- Disminución de la mortalidad: se consigue una disminución de la mortalidad si se detecta el cáncer en sus etapas más tempranas y se aplican tratamientos específicos más sencillos y eficaces.
La Prevención Primaria es el conjunto de acciones encaminadas a modificar los hábitos poco saludables de la población hacia otros más adecuados. Con esto se consigue evitar que los factores de riesgo actúen sobre un órgano concreto y causen en él alteraciones que puedan generar un cáncer. Para que una persona modifique un hábito es necesario una serie de pasos:
- Que posea información suficiente y veraz sobre un factor de riesgo.
- Que tome conciencia del riesgo que supone mantener dicho hábito.
- Que tome la decisión de modificarlo o evitar contacto con él.
- Que mantenga a lo largo del tiempo el cambio de comportamiento.
Esto se consigue ofreciendo información a la población a través de campañas y llevando a cabo programas de Educación para la Salud en los que se conciencie y ayude a la persona a adoptar y mantener hábitos de vida saludables. El principal objetivo es la sensibilización de la población.
La Prevención Secundaria es la agrupación de acciones dirigidas a detectar precozmente determinados tumores malignos. Este conjunto de acciones se denominan programas de screening o cribado.
Cada programa se caracteriza por una serie de factores:
- Debe ir dirigido a detectar precozmente un tumor concreto. Este tumor debe poderse diagnosticar bien en las fases más precoces de la enfermedad o en fases premalignas o en ambas circunstancias.
- Es preciso determinar qué población sana tiene más riesgo de desarrollar dicho cáncer.
- Debe existir una prueba que lo detecte de forma sencilla.
- Es preciso que exista tratamiento eficaz para las fases tempranas de la enfermedad.
El objetivo de la Prevención Secundaria es disminuir la prevalencia, evitar las secuelas, mejorar el pronóstico y disminuir las tasas de mortalidad.