Servicios gratuitos para pacientes y familiares
15/02/2013 - 12:48
Todo el mundo conoce el día de San Valentin; sin embargo, sólo un 5% de la población conoce que el 15 de febrero es el día mundial de la lucha contra el cáncer infantil.
Nueve y media de la mañana, llego al Oncológico de Madrid, y me pregunto… ¿es éste un lugar de sufrimiento o un lugar de esperanza?
A nadie le agrada ver sufrir a otro, y mucho menos si es un ser querido o uno mismo. Si encima ves niños…, ¡Uf!
¿Puede la belleza, la sabiduría, la bondad, el compañerismo, la alegría,… habitar en un lugar así? Rotundamente SÍ.
¿Todos los ojos pueden verlo? Depende de:
- Si ves o miras,
- Si oyes o escuchas,
- Si crees o desconfías.
Yo vi sonreír a pacientes y profesionales a pesar del dolor. Sencillos gestos como por ejemplo: recordarles por su nombre, acariciarles el brazo, hacer una broma para desdramatizar, una palabra de aliento, hablarles suavecito y con paciencia…, en definitiva, gestos de cariño, son vitales para sobrellevar la cara más amarga de la vida.
Recibir amor es un regalo, saber comunicarlo, un don. Sólo la vocación y el cariño que se deposita en la tarea que se realiza puede sostener en el tiempo esa calidad de servicio (con mayor mérito en situaciones de incertidumbre y estrés laboral, como el que se vive ahora en el sector sanitario).
Cuando se mide satisfacción global de los clientes en encuestas de calidad, el 80% se refiere a aspectos relacionados con el factor humano y de servicio.
En un momento tan crítico como el que vivimos en la actualidad, donde la falta de recursos públicos (sanidad, educación, justicia…) van notándose cada vez más, deberíamos recordar que las PERSONAS SOMOS LO MÁS IMPORTANTE y que nos queda mucho por hacer en beneficio de todos.
Tenemos menos dinero, pero más ayuda entre vecinos. Menos soluciones, pero más creatividad. Es el momento de desarrollar todo nuestro potencial, adormecido durante años por necesidades falsamente cubiertas por la comodidad y la aparente seguridad de un Estado del bienestar.
Volviendo al ejemplo anterior, no todas las personas que visitan oncología (y que obviamente están pasando una profunda crisis de salud) tienen las mismas posibilidades de futuro. Muchas se salvarán, otras no; pero nadie las trata como si estuvieran muertas.
Y nosotros… en nuestra crisis económica y social, ¿damos por muerta una generación de jóvenes?, ¿damos por muertos a los mayores de 52 años? , ¿damos por muertos nuestros derechos?, ¿damos por muerta la vocación y la honradez política?
En el hospital se lucha por las personas, por todas, por es simple hecho de que continúan vivas, y se hace con dedicación y alegría.
España es un país gravemente afectado por múltiples enfermedades: falta de valores, de liquidez, de capacidad de esfuerzo. Tenemos varios tumores: la corrupción, el desempleo, la violencia…
¿Qué es España hoy, un lugar de sufrimiento o un lugar de esperanza? Desde la cúpula del poder, se nos aconseja echar la vista fuera de nuestras fronteras para seguir vivos laboralmente hablando.
¿Por qué nos rendimos? Necesitamos recuperar la confianza y renovar la vocación de: políticos, educadores, sanitarios, empresarios… y necesitamos pacientes con fe y ganas de luchar… porque MIENTRAS HAY VIDA,… HAY ESPERANZA.
¿Te apuntas?
Difúndelo si te ha gustado. http://maricarmencamacho.wordpress.com/2013/02/14/se-buscan-personas-positivas-y-con-ganas-de-dar-lo-mejor-de-si-misms/
Nueve y media de la mañana, llego al Oncológico de Madrid, y me pregunto… ¿es éste un lugar de sufrimiento o un lugar de esperanza?
A nadie le agrada ver sufrir a otro, y mucho menos si es un ser querido o uno mismo. Si encima ves niños…, ¡Uf!
¿Puede la belleza, la sabiduría, la bondad, el compañerismo, la alegría,… habitar en un lugar así? Rotundamente SÍ.
¿Todos los ojos pueden verlo? Depende de:
- Si ves o miras,
- Si oyes o escuchas,
- Si crees o desconfías.
Yo vi sonreír a pacientes y profesionales a pesar del dolor. Sencillos gestos como por ejemplo: recordarles por su nombre, acariciarles el brazo, hacer una broma para desdramatizar, una palabra de aliento, hablarles suavecito y con paciencia…, en definitiva, gestos de cariño, son vitales para sobrellevar la cara más amarga de la vida.
Recibir amor es un regalo, saber comunicarlo, un don. Sólo la vocación y el cariño que se deposita en la tarea que se realiza puede sostener en el tiempo esa calidad de servicio (con mayor mérito en situaciones de incertidumbre y estrés laboral, como el que se vive ahora en el sector sanitario).
Cuando se mide satisfacción global de los clientes en encuestas de calidad, el 80% se refiere a aspectos relacionados con el factor humano y de servicio.
En un momento tan crítico como el que vivimos en la actualidad, donde la falta de recursos públicos (sanidad, educación, justicia…) van notándose cada vez más, deberíamos recordar que las PERSONAS SOMOS LO MÁS IMPORTANTE y que nos queda mucho por hacer en beneficio de todos.
Tenemos menos dinero, pero más ayuda entre vecinos. Menos soluciones, pero más creatividad. Es el momento de desarrollar todo nuestro potencial, adormecido durante años por necesidades falsamente cubiertas por la comodidad y la aparente seguridad de un Estado del bienestar.
Volviendo al ejemplo anterior, no todas las personas que visitan oncología (y que obviamente están pasando una profunda crisis de salud) tienen las mismas posibilidades de futuro. Muchas se salvarán, otras no; pero nadie las trata como si estuvieran muertas.
Y nosotros… en nuestra crisis económica y social, ¿damos por muerta una generación de jóvenes?, ¿damos por muertos a los mayores de 52 años? , ¿damos por muertos nuestros derechos?, ¿damos por muerta la vocación y la honradez política?
En el hospital se lucha por las personas, por todas, por es simple hecho de que continúan vivas, y se hace con dedicación y alegría.
España es un país gravemente afectado por múltiples enfermedades: falta de valores, de liquidez, de capacidad de esfuerzo. Tenemos varios tumores: la corrupción, el desempleo, la violencia…
¿Qué es España hoy, un lugar de sufrimiento o un lugar de esperanza? Desde la cúpula del poder, se nos aconseja echar la vista fuera de nuestras fronteras para seguir vivos laboralmente hablando.
¿Por qué nos rendimos? Necesitamos recuperar la confianza y renovar la vocación de: políticos, educadores, sanitarios, empresarios… y necesitamos pacientes con fe y ganas de luchar… porque MIENTRAS HAY VIDA,… HAY ESPERANZA.
¿Te apuntas?
Difúndelo si te ha gustado. http://maricarmencamacho.wordpress.com/2013/02/14/se-buscan-personas-positivas-y-con-ganas-de-dar-lo-mejor-de-si-misms/
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