Hace 11 años

Durante el tiempo que dura una vida la suerte te brinda varios tragos, alguno de los cuales no son nada agradables. La pérdida de un ser querido por una enfermedad como es el cáncer es un trago amargo que, sin querer, hemos tenido que tomar recientemente.
Para hacer más llevadero el amargo trago existe un equipo de profesionales que te hacen más dulce la estancia en un lugar donde el final es la muerte. La Unidad de Cuidados Paliativos del Hospital Provincial de Pontevedra es un lugar agridulce, agrio por el motivo por el que trasladan a un enfermo allí y dulce por el trato tan amable y sobre todo humano que tiene todo el personal del lugar.
Quizás, la familia de Elías Torres sea una más de las muchas que han pasado por el lugar pero sin duda el significado que ha tenido el trato de todo el equipo de paliativos hacia el enfermo como hacia su esposa e hijos, ha cobrado una importancia considerable por ser un trance muy duro para todos.
Precisamente por este motivo escribimos esta carta a modo de agradecimiento. Por ser un gran apoyo para las familias que pasan por el lugar haciéndole más llevadero el ya de por si amargo trago de despedir a un ser querido os habéis labrado un hueco en nuestros corazones.
En nombre de la familia Torres y del propio Elías, expresamos en forma de misiva nuestro más sincero agradecimiento.
Las palabras arriba escritas han sido entregadas en forma de carta al personal del hospital cuatro días después del fallecimiento de mi padre. Tenía que expresar mi agradecimiento y el de mi familia por todo el cariño que nos han brindado en aquel lugar, guardo un recuerdo agridulce (como ya he dicho) y todavía estoy en proceso de duelo por la pérdida tan grande que he sufrido. Estoy acuedioendo a la psicóloga de la AECC de Vigo me está viniendo muy bien, quería reconocerles a ellos la inmensa labor que desarrollan.
Hace 11 años

Hola lupinha : Siento mucho la muerte de tu padre; y la verdad es que tu comentario me trae al recuerdo la del mio, hace ya ocho años ( como pasa el tiempo ) y el mismo sabor agridulce que tu mencionas de la unidad de paliativos que también le atendió en sus últimos días. Sirva este comentario de reconocimiento público para esos profesionales que calladamente te atienden con el máximo cariño y profesionalidad.

Un abrazo y PA´LANTE

Hace 11 años

Querida lupinha, recibe nuestro más sentido pésame. Es una carta preciosa, gracias por compartirla con nosotros. Un abrazo.

Hace 11 años

Pienso igual que tú lupinha, las personas de paliativos....desde las auxiliares, enfermeras, Dres., psicólogos...són personas hechas de un material especial. No te dejan sólo en ningún momento durante ese trance, ni al enfermo ni a la familia allegáda, facilitándo, a parte de que el enfermo no sufra, asisténcia psicológica a sus seres queridos que ven cómo su familiar se va apagándo...todo está preparado para que dentro de nuestro gran dolor, nos sintámos reforzádos para no caer. Yo tampóco tengo palabras, para hablar de las personas que no nos dejáron ni un sólo momento , durante la marcha de nuestro hijo, no se separaron de nosotros ni un sólo instánte, atentos a todo lo que el enfermo o la familia necesitábamos.....siempre tuvímos un brazo amigo que nos cogia, un hombro dónde llorar y sobretodo, la tranquilidad de que nuestro hijo ni sufrió, ni se enteró de náda...de eso se encargo su Dra. que no se separó de su cama durante horas. Me uno a tus agradecimientos y los entiéndo......aprobecho y los envio al Hospital Sant Joan de Deu de niños ( Esplugues del Llobregat). Gracias a todos, no se pága con nada.......

Hace 11 años

Antetodo mi mas sincero pesar por gtan querida pérdida, pero dicen que el ser agradecido, es de ser bien nacido, y tu demuestras tu agradecimiento con esa carta tan bonita y que tantas personas que estan en estas unidades se merecen. Ellas te dan la paz que necesitas en esos momentos y es tan preciso sentirse querido en circunstancias tan tristes y duras que la verdad es que nunca se olvidan. Espero que os repongais pronto de tan sensible pérdida.

TODO MI CARIÑO Y UN ABRAZO